Un nuevo paradigma organizacional
El comienzo del
siglo XXI ha supuesto un cambio de paradigma en la gestión de las
organizaciones empresariales. El coaching es una herramienta fundamental para
el desarrollo de este nuevo paradigma. Propone una metodología orientada a
trabajar con individuos para obtener resultados en sus vidas o en sus
organizaciones que no pudieron conseguir por sí mismos y están comprometidos a
lograr.
Esta disciplina
se basa en el vínculo basado en la confianza, compromiso y responsabilidad
entre dos partes: el coach y el coachee (cliente), en la que ambos operan,
esencial pero no excluyentemente, con herramientas conversacionales, es decir,
basadas en el diálogo. La finalidad de esta relación es el crecimiento del
coachee en un área previamente consensuada, donde el coach funciona como “socio
facilitador” del aprendizaje. La intervención del coach puede darse a nivel
individual o grupal.
Uno de los
beneficios del coaching es potenciar el rendimiento en momentos clave de una
organización, por ejemplo en situaciones de cambio corporativo. También facilita
la comprensión y aceptación del cambio, y habilita espacios de aprendizaje que
permiten reducir el costo emocional que genera un momento de inestabilidad,
ampliando así las posibilidades de acción efectiva.
La intervención
de un coach profesional, en grupos de trabajo o en trabajo personal sobre los
directivos, está transformándose rápidamente en una ventaja competitiva de la
organización.
¿Qué aporta el
Coaching a la empresa?
La capacidad
reflexiva y las competencias relacionales y de comunicación son características
claves a desarrollar en la empresa actual, y en este contexto el Coaching hace
su aporte permitiendo a las organizaciones actuales contar con profesionales
comprometidos con la misión y el objetivo de las mismas; capaces de pensar por
sí mismos y con autonomía suficiente para tomar decisiones y dar respuesta a las
necesidades de cada momento, con un estilo de liderazgo basado en las personas,
sus relaciones, motivaciones, inquietudes y necesidades.
El coach trabaja
para que su coachee (cliente) disponga de otros puntos de vista sobre una
determinada problemática y descubra aquellas creencias y valores que puedan
estar limitando su desempeño, impidiendo el logro de sus objetivos y
dificultando su desarrollo.
Por último, el
coach impulsa a su coachee a actuar. A partir de la intervención del coach, el
coachee puede tener una nueva mirada de la situación, permitiéndole realizar
acciones que antes no estaban disponibles para él. Al realizar nuevas acciones
puede lograr resultados diferentes, pudiendo con ello aportar mayor valor
añadido a la empresa y a su propio desarrollo personal.
Beneficios del Coaching en la empresa- Facilita que las personas
se adapten a los cambios de manera eficiente y eficaz.
- Moviliza los valores
centrales y los compromisos del ser humano.
- Estimula a las personas
hacia la producción de resultados sin precedentes.
- Renueva las relaciones y
hace eficaz la comunicación en los sistemas humanos.
- Predispone a las personas
para la colaboración, el trabajo en equipo y la creación de consenso.
- Desarrolla la
potencialidad de las personas, permitiéndoles alcanzar objetivos que de
otra manera son considerados inalcanzables.
- Permite a la gente
encontrar sentido y valor en su función, y trabajar motivada y con
responsabilidad.
- Contribuye a clarificar
los objetivos de la organización y planificar estratégicamente las metas.
Una cultura de Coaching fomenta el crecimiento
personal, al tiempo que incrementa la productividad y la satisfacción de los
clientes. Dicha cultura valora la profesionalidad y aprecia las contribuciones
únicas del
individuo independientemente de la tarea que desempeñe.
individuo independientemente de la tarea que desempeñe.
Escuela de Coaching Profesional
www.coachingescuela.com.ar
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